Érase una vez en un reino desconocido para todos, una elfa especialmente dotada para el dibujo. Se llamaba Flora y tenía tal talento que un día uno de sus dibujos tomó vida. Pero cuando quiso cogerlo, el dibujo que era un pájaro, echó a volar. Entonces, la joven elfa se levantó y corrió hacia su pájaro. Flora corrió tanto que quedó sin aliento. Así que se sentó en una piedra y miró alrededor. ¡ Pero qué desgracia ! la elfa no estaba en su amado reino. Además Flora no había encontrado a su pájaro. Deseperada se puso a llorar. De repente, un pájaro se posó en su hombro. ¡ Era sel suyo ! Después el pájaro le enseñó con el pico un magnífico cuaderno de dibujo. Entonces Flora dibujó una puerta que, esperaba, la guiaría a su casa. La joven elfa entró para encontrar su amado reino.
A partir de ese día, Flora dibujó en todas partes y a todas horas en su cuaderno. Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
Alyssa, 1° de ESO
![](https://lewebpedagogique.com/miprofemaya/wp-content/themes/grey-opaque/plugins/lazy-load/images/1x1.trans.gif)